ARTICULO EXCLUSIVO: ¿Realmente disfrutamos del dolor de los personajes?
ARTICULO: ¿Realmente disfrutamos del dolor de los personajes?
Un articulo escrito por: Daniel Ricardo para el medio CriticoDaniel.
Es ampliamente conocido que los personajes tristes o trágicos son los que más atraen a los espectadores, o al menos son los más populares. Y es que a todos nos encanta ver historias en las que una persona atraviesa momentos difíciles o intenta lidiar con problemas que podrían arruinar la vida de cualquiera. La soledad, la depresión, el intentar superar eventos traumáticos del pasado, perder a un ser querido o tener una vida llena de adversidades son algunos de los elementos que suelen tener los personajes más populares.
No es una coincidencia que los personajes más queridos sean aquellos que han sufrido mucho. Sin embargo, la verdadera razón por la cual esto sucede no está del todo clara. Existe una opción algo inquietante que podríamos considerar, y es que en el fondo la mayoría de las personas somos psicópatas que disfrutan viendo sufrir a los demás. Sin embargo, esta suposición no es válida, ya que cuando vemos a estos personajes, lo que más deseamos para ellos es que puedan superar sus problemas y encontrar la felicidad. Cuando esto no sucede y vemos que un personaje con problemas no logra tener un final feliz, nos deja un vacío durante mucho tiempo. En realidad, lo que nos gusta de verdad no es verlos sufrir, sino presenciar historias tristes con finales felices.
(Foto referencial: Spiderman interpretado por Tobey Maguire. Cortesia: Sony Pictures).
Sin embargo, aquí surge un problema. ¿Por qué preferimos las historias tristes con finales felices sobre las historias que son simplemente felices, sin personajes que sufran? Esta preferencia implicaría, una vez más, que nos gusta ver el sufrimiento. Incluso a veces, cuando un personaje que no nos interesaba comienza a tener problemas y se vuelve depresivo, de repente empieza a captar nuestra atención. O al contrario, cuando un personaje triste logra encontrar la felicidad, pierde popularidad y otro personaje triste toma su lugar. Esto nos lleva de nuevo a la pregunta: ¿por qué preferimos a personas solitarias con problemas en lugar de aquellos que irradian felicidad?
Una explicación bastante popular es que, cuando los vemos, nos sentimos identificados con ellos debido a nuestros propios problemas. Incluso si su situación difiere mucho de la nuestra, encontramos reflejos de nosotros mismos en ellos. Y cuando estos personajes logran obtener la felicidad deseada, nos brindan una especie de esperanza que nos dice que nosotros también superaremos nuestros problemas. En otras palabras, nos gusta la esperanza que sus finales felices generan.
Esta explicación es bastante razonable, pero estaríamos ignorando el hecho de que muchas veces ni siquiera nos identificamos con estos personajes, sino que simplemente queremos verlos bien. Un gran ejemplo de esto es BoJack Horseman, donde los espectadores difícilmente se sentirían identificados con él, ya que la serie muestra claramente que él mismo generó muchos de sus problemas y cometió actos cuestionables. Aun así, como espectadores, deseamos verlo superarse y encontrar la felicidad.
Esto plantea algunos problemas adicionales, ya que, por alguna razón, a pesar de que se nos muestran claramente sus acciones incorrectas, los espectadores no logramos odiarlo y es que al verlo sufrir, se nos olvida que en realidad es una persona con malas acciones. Pareciera que asociamos la tristeza con lo bueno, lo cual hace que lo sigamos queriendo a pesar de todo. Esto se ha observado en numerosas ocasiones, especialmente cuando un villano tiene un pasado triste. Automáticamente, empezamos a sentir empatía por él y tendemos a olvidar los horribles actos que ha cometido. Esto no debería ocurrir, ya que el hecho de que alguien haya sufrido no implica automáticamente que sea una buena persona. Sin embargo, inexplicablemente, seguimos sintiendo afecto por ellos.
Este fenómeno se hace aún más evidente en el caso de los héroes, ya que tendemos a asociar cuánto han sufrido con su valía como personajes. Incluso llegamos a decir que un héroe está mejor desarrollado cuanto más haya sufrido en comparación con otros. También se refleja en los personajes que nos enamoran en lugar de inspirarnos. Cuando el protagonista se encuentra en un estado depresivo por alguna razón, esto lo vuelve más atractivo para los espectadores. La explicación en este caso es más clara: cuando un personaje triste logra alcanzar la felicidad, nos hace sentir bien. Y cuando esto no sucede, nos sumimos en una sensación de tristeza. Esto revela mucho sobre nosotros como espectadores, pues significa que deseamos que algo bueno le suceda a estos personajes. Queremos que se sientan bien, que alcancen sus metas y que superen sus problemas.
Preferimos a las personas que necesitan de nuestra ayuda y creemos que podemos mejorar sus vidas en lugar de aquellas que no nos necesitan. Sin embargo, esto también implica que somos un poco masoquistas, ya que sabemos que como espectadores no tenemos el poder de cambiar la historia del personaje, y eso solo está en manos del autor. Aun así, seguimos viendo su historia con la esperanza de que todo termine bien, a pesar de que en realidad no podemos hacer nada al respecto. Nos arriesgamos a presenciar el sufrimiento del personaje y, por ende, a sufrir nosotros mismos.
Para concluir, existen dos razones principales por las que nos gustan estos personajes tristes. En primer lugar, nos sentimos identificados con ellos y su felicidad nos brinda esperanza de superar nuestros propios problemas. En segundo lugar, en el caso de no sentirnos identificados, preferimos a estos personajes porque deseamos ayudarlos como espectadores, hacer que sean felices, cumplir sus metas y superar sus dificultades. Es decir, no somos psicópatas que disfrutan del sufrimiento ajeno, sino todo lo contrario: anhelamos la felicidad y el bienestar de los personajes a quienes seguimos en sus historias. Aunque carecemos del poder de cambiar su destino, nos aferramos a la esperanza de que todo mejore para ellos, incluso si eso implica sufrir un poco mientras los acompañamos en su viaje emocional.
Esta publicacion fue publicada exclusivamente en Patreon como articulo de pago en Junio de 2023".
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